SALTA: POESÍA, PAISAJE Y ABANDONO

Por Pablo Stasiuk

Hace algunas semanas emprendí un viaje hacia la provincia de Salta, lugar al que considero origen de las mejores poesías que conforman nuestra música popular.

Jaime Dávalos, Ariel Petrocelli, Antonio Nella Castro, El Barba Castilla y el Cuchi Leguizamón…para nombrar a los más visibles y destacados. Hacía tiempo que quería ir a Salta para ver qué tenía ese paisaje y esa gente, que inspiraban a las zambas más hermosas que se puedan escuchar…con el hermoso agregado de que las cantara el Dúo Salteño. Frutilla del postre.

El camarada Leo ofició de guía en el paseo. La consigna era dejar de lado ese sello de “Salta la linda” y recorrer parte de la verdadera provincia. La que sufre el abandono en todos los sentidos. Kilómetros y kilómetros encontrando pueblos semi abandonados, sin ningún tipo de comunicación o asistencia. Lugares de paisajes conmovedores habitados por gente que está viviendo el paso del tiempo hasta su muerte.

Allí nació FUNERAL DEL VALLE

FUNERAL DEL VALLE

En éste pueblo ha muerto hasta el silencio
atragantado a exilios, malherido.
Como en un cementerio de los vivos
somos lápida en viaje hacia el olvido.

Aquella nube abraza a una montaña
la rodea, le palpa la tristeza,
y al ver que anda rondándole la muerte
se va a llorar su lluvia hacia otra tierra.

No se puede habitar en el vacío
ni respirar sin voces de los hijos.
No vivimos, solo pasan los días,
vivir es darle al tiempo algún sentido.

Mi casa está cubierta de un cobrizo
polvo que van dejando los abrazos
de todos los que huyen de ésta tierra
dejando el abandono tras sus pasos.

Soy un vivo que pasa el día muriendo
ya ni puedo llorar porque he olvidado
cómo soltar mi lágrima a la ausencia,
Y éste es mi funeral, lo estoy cantando.

Ya adentrados en la provincia y parando en esos pueblos vacíos, sin la vida que les da el trabajo, llegamos a un cementerio muy pequeño. Allí había varias tumbas con sus nombres, todas muy modestas…pero me traje la imagen de dos pequeñas tumbas de dos hermanos hechas con algunas piedras. Si, la pobreza no es propiedad solo de los vivos…Así nació: NUBES DE PIEDRA

NUBES DE PIEDRA

Dos tumbas, como dos ojos
siempre dormidos.
Como mis ojos,
viento y silbido.
Pájaro herido.

Dos huecos, como mis manos
siempre vacías
si no hay trabajo
si no hay comida.
No esperes vida.

Mis hijos, son dos raíces
ya no florecen.
Como ésta tierra
seca y vacía.
Son piedra fría.

El tiempo llega y se queda
como mi vida.
Reloj de arena,
de horas dormidas.
Que no son mías.

La sal del llanto que guardo
son atraganto
como las penas
y el desencanto
que aquí les canto

Quiero huir y no puedo
por las heridas,
por esos ojos
que fueron vida.
Hoy son ceniza.

Dos tumbas, como mis sueños.
Nubes de piedra
que me condenan
junto a ésta tierra.
Como a una guerra.

 

En unos días que nuestro “guía” no nos pudo acompañar, nos fuimos una escapada hasta Jujuy. Tilcara y Purmamarca. Paisajes conmovedores en dos pueblos que viven exclusivamente del turismo y de las artesanías que puedan venderles (cada vez menos). En un mediodía, en la plaza de Purmamarca, me senté a tomar unos mates mientras mi hijo se juntaba con un montón de chicos que jugaban. La mayoría eran hijos de los puesteros. Después de charlar un rato les pregunté qué iban a hacer cuando terminen la escuela. La respuesta fue lapidaria y triste: IRNOS DE ACÁ A BUENOS AIRES. ¿Qué futuro puede tener una tierra en la que el sueño de sus hijos sea irse lo antes posible? PAJARO PURMAMARQUEÑO

PÁJARO PURMAMARQUEÑO

En Purmamarca hay un nido
de pichones pequeñitos
van volando por las ramas
con su silbido chiquito.

Pájaros de ojos muy negros
con la verdad en su pico
soñando ser cóndor grande
para volarse lejitos.

Que pena pichón jujeño
que cuando emprendas tu vuelo
solo te quede la ruta
de volar por otros cielos
se llevaron el trabajo
juntito con tus anhelos.

Ojalá la rebeldía
crezca en tus plumas morenas
y vuelvas, pájaro grande
por los aires de tus tierras.

Todo el futuro de exilio
desangra en tu cielo herido.
Retornarás, lucha al vuelo,
junto con otros silbidos.

Esto es algo de lo que me ha dejado el paso por Salta y Jujuy. Tal vez la poesía sublime que surge de ese pueblo sea la manera de expresar el dolor y el pesar por ver como una porción enorme de personas son dejadas al margen del sistema y condenadas a sobrevivir en medio de la nada hasta que la muerte llegue. Paisajes, belleza, vida, muerte, tierra, historias, cultura.

Salta, cuna de mis poetas favoritos está en peligro de muerte. Parte de la solución puede estar entre las notas que encuentran en ésta misma Revista y que realizan intelectuales calificados.

Yo, como poeta, solo traje un puñado de versos para repartirlos al aire. CINCEL DE VIENTO

CINCEL DE VIENTO

Hace mil años, creo, que he nacido
o que empecé a morir,
no me doy cuenta.
El viento va moldeándome la cara
y me envejece a golpes
con su cincel de piedras.
Soy mi propia estatua,
mi homenaje,
de tanto resistir
frente al olvido.
He visto a mis hijos saludarme
desde el hervor plomizo de la tarde.
Y los lloro en silencio
por las noches
cuando me sueño muerto
en éste pozo.
Hace rato que aquí,
en éste infierno,
no hay instante que separe
muerte y vida.
Todo es tedio flotando en el hartazgo
un abandono animal
del alma mía.

Revista comunista de análisis y debate