Una acusación falsa y sin pruebas, pero marche preso.
Desde Revista Centenario entrevistamos a Candela Cabezas para conocer la situación de su hermano Alan, quien se encuentra injustamente detenido, hace más de un año, por el robo de un vehículo perteneciente a un famoso periodista de la Argentina.
Centenario: ¿De qué se lo acusa a tu hermano?
Candela: Por el robo agravado con arma a un periodista.
Centenario: ¿Dónde y cuándo ocurrió el hecho?
Candela: El robo fue un 28 de mayo del año pasado en el barrio de Caseros.
Centenario: ¿Cómo detienen a tu hermano?
Candela: El 4 de junio del año pasado la policía entra a nuestra casa con una orden de allanamiento, donde figuraba otro domicilio, no el nuestro. En el allanamiento, sin testigos ni filmaciones, encuentran la supuesta llave en la habitación de otro de mis hermanos, no de Alan. Después se comprobó que la supuesta llave no era del vehículo que buscaban.
Por ese motivo detienen a mis dos hermanos, Brian y Alan, pero a los dos días liberan a Brian y dejan detenido a Alan, que sigue en esa situación hace más de un año.
Centenario: ¿Cuáles son las pruebas por las que detienen a tu hermano?
Candela: Después del allanamiento se hicieron todos los peritajes y distintas pruebas que dieron negativo, tanto en las huellas digitales como en el seguimiento del celular.
Los otros detenidos por el robo declararon que no conocían a mi hermano, pero en la rueda de reconocimiento, la víctima del robo, cree reconocerlo por los ojos y la nariz.
Por eso sólo lo tienen detenido y encima la victima del robo no está del todo segura, sólo dice que cree que fue mi hermano.
Centenario: ¿Quién es el periodista?
Candela: No lo puedo mencionar porque me denunció a raíz de las notas que hice y dije su nombre.
Centenario: ¿y por qué te denuncia?
Candela: Por amenazas, pero en ningún momento lo amenacé sólo dije que estaba mintiendo. Así que me tengo que precaver, pero no voy a dejar de defender a mi hermano y que la verdad se conozca.
Centenario: ¿Qué dice su abogado? ¿Cómo sigue la causa?
Candela: Nosotros teníamos un abogado particular que había contratado mi papá, pero no pudo hacer mucho, o no sé qué pasó, por eso ahora sumamos a un abogado de Derechos Humanos. Esta semana se van a juntar para buscar la solución a la situación de Alan.
Centenario: ¿En dónde se encuentra detenido?
Candela: En la alcaldía 45 o 46 de los tribunales del municipio de San Martín. Al principio de su detención estuvo en la DDI del municipio de Tres de Febrero donde nunca lo pudimos ver, sólo podíamos llamarlo por teléfono una vez por semana, los viernes, durante 6 meses. Ahora que lo trasladaron a la alcaldía lo pudimos ver, yo, mi mamá y mi papá.
Centenario: ¿Cómo lo ven? ¿Cómo está de ánimo?
Candela: Dentro de toda esta situación está bien. Todos los días llama a la hija para ver cómo está, aunque le duele no poder estar con su familia. Pero dentro de todo está bien. Sólo está esperando que haya una solución.
Centenario: ¿Cuándo se inicia el juicio?
Candela: La abogada nos dijo que hay que esperar hasta un año y medio para poder pedir algo por mi hermano.
Centenario: ósea que una victima inocente tiene que esperar un año y medio para poder estar en libertad. ¿ustedes cómo están llevando esta situación?
Candela: Fue muy difícil, sobre todo al principio porque ni nosotros, ni ningún familiar nuestro está acostumbrado a esa situación. Quizás quien esté acostumbrado a tener un familiar que haga esas cosas se la aguanta, pero para nosotros es muy difícil.
Cuando estaba en la DDI había que llevarle todos los días la comida, porque no tenía que comer. En todos esos meses nunca vio la luz del sol. Estuvo encerrado entre cuatro paredes. También es difícil tener que estar explicándole a la hija por qué no está con él.
Encima de todo nos íbamos enterando que los que estaban detenidos con él iban siendo liberados. Pero tenemos fe de que salga.
Ahora que está en la alcaldía le dan de comer, puede hacer estar un rato al sol y lo podemos visitarlo.
Centenario: Bueno Candela, te agradecemos que nos hayas atendido y nos ponemos a disposición de tu familia para lo que necesiten.
Candela: Gracias a ustedes por escucharnos.